MARÍA Y EL MUNDO

"Queridos hijos, hoy también los invito a que se conviertan y crean con mayor fuerza en Dios. Hijitos, ustedes buscan la paz y oran de distintas maneras pero aún no le han dado el corazón a Dios, para que Él pueda llenarlos con su Amor. Esta es la razón por la que estoy con ustedes, para enseñarles y para acercarlos al Amor de Dios. Si aman a Dios por sobre todas las cosas, entonces les será más fácil orar y abrirle el corazón. Gracias por haber respondido a mi llamado" (María en Mediugorie, 25/5/99).

"Queridos hijos, hoy también me regocijo con ustedes y a todos los invito a la oración de corazón. Hijitos, los invito a que todos agradezcamos a Dios aquí conmigo las gracias que les da a través de mí. Deseo que comprendan que aquí quiero crear no sólo un lugar de oración sino también un encuentro de corazones. Deseo que mi corazón, el de Jesús y sus corazones se fundan en un corazón de amor y paz. Por tanto, hijitos, oren y alégrense por todo lo que Dios hace aquí, a pesar de que Satanás provoca pleitos e intranquilidad. Yo estoy con ustedes y los conduzco a todos por el camino del amor. Gracias por haber respondido a mi llamado" (María en Mediugorie, 25/7/99).

"Queridos hijos, también los invito a que en los colores de la naturaleza glorifiquen a Dios Creador. Él, a través de la flor más pequeña, les habla de Su belleza y de la profundidad del amor con que los ha creado. Hijitos, que la oración brote de sus corazones como el agua fresca de un manantial. Que los campos de trigo les hablen de la misericordia de Dios hacia cada criatura. Por lo tanto, renueven la oración de agradecimiento por todo lo que les da. Gracias por haber respondido a mi llamado" (María en Mediugorie, 25/8/99).

"Enseñen a los niños a orar. Enseñen a los niños a vivir en la verdad y vivan ustedes mismos en la verdad. Chernobyl es una advertencia y una señal para el mundo entero. Reciten el rosario constantemente. El rosario es el arma contra Satanás. Él teme al rosario. Recen el rosario todos los días, constantemente, cada vez que se reúnan. He venido con el expreso propósito de agradecer al pueblo ucraniano lo mucho que ha sufrido por la Iglesia de Cristo en los últimos setenta años. He venido a consolarlos y a decirles que su sufrimiento pronto llegará a su fin. Ucrania se convertirá en estado independiente. Arrepiéntanse y ámense los unos a los otros. Se acercan los tiempos que han sido pronosticados como los tiempos finales. Observen la desolación que rodea al mundo; los pecados, la indolencia, el genocidio. He venido a ustedes con lágrimas en los ojos y les imploro que oren y se esfuercen por hacer el bien, y por la gloria de Dios. Ucrania fue el primer país que me reconoció como Reina y lo he acogido bajo mi cuidado. Obren por Dios, porque sin ello, no hay felicidad y nadie puede alcanzar el Reino de Dios. Ustedes formarán parte de mi corazón y vivirán unidos. Sigan sin temor a los dirigentes de la Iglesia y ganarán su propio país, junto con el poder y el amor entre las naciones del mundo. Yo amo a Ucrania y al pueblo ucraniano por su sufrimiento, su lealtad... a Cristo Rey, y protegeré a Ucrania por la gloria y el futuro del Reino de Dios en la tierra. Los ucranianos deben hacerse apóstoles de Cristo entre el pueblo ruso porque, si Rusia no vuelve al cristianismo, habrá una Tercera Guerra Mundial" (María en Ucrania,1987).